El Espacio Callejón recibe muchas y diversas propuestas con espíritu abierto. En su sala se viven
experiencias de búsqueda. Esta vez es Supervivencia de Alina Folini.
escenario y está preparado de tal manera que el público queda repartido a su alrededor.
También está habilitado un espacio que lo rodea por arriba. Es una decisión que
implica la democratización espacial y del punto de vista. La luz es neutral,
blanca, ilumina todo por igual. No hay privilegiados.
de algunos, de muchos, de todos. Ella entra al espacio claro, nombra y numera.
Marca diagonales. Se mueve en una composición propia en la que involucra el
gesto facial.
ordenar escenas, momentos diversos en el transcurso de la propuesta. También
puede ser una manera de marcar objetivos específicos en una organización
programática.
pueden ver escenas de ensayos, pruebas, imágenes de detalles, de lo micro:
oreja, pelo, ojo. Aquello que la percepción en el momento en vivo no alcanza a
apreciar con nitidez. Es un ordenamiento en la dirección de la mirada. El
espectador es guiado hacia el microdetalle.
en el video y al finalizar, como en una prolongación o loop, aparece la presencia física de Alina que continúa corriendo
en la escena.
recurrentes, repetitivos, presentan un equilibrio tan inestable como puede ser
la supervivencia. En un instante es como si, incluso, estuviera movida por
otro.
la escena se llena de maderitas que acomoda, un tronco que un chico golpea, unas
tablas que equilibran entre sus cuerpos dos chicas. Madera, tronco, árbol,
bosque, vida, sería una posible asociación libre.
de la supervivencia, aquí ligada a la vida, al medio ambiente. Pero no hay
alusión a la naturaleza que no remita finalmente al humano como un ser vivo
más. ¿Será la supervivencia del hombre? ¿Será la supervivencia del arte? ¿Será
la supervivencia de la danza?
entre las secuencias aparece “coreografía”, una escena donde realiza marcas,
recorre, salta, se tira al suelo.
seguidor persigue su sombra y sus movimientos vuelven a ser rápidos,
disruptivos, en oposición a la lentitud de la música que suena, quedando el
foco como única luz.
comodidad que abre preguntas sobre lo que puede transmitir o develar un gesto,
sobre la comunicación de una experiencia, sobre las asociaciones posibles de
una interpretación, sobre la construcción de sentido.
Alina Folini.- Vestuario: Coca Baltar.-Iluminación: Matías Sendón.- Video: Nina
Lacroix.- Sonido: Pablo Verón.- Fotografía: Valeria Fiorini.- Diseño gráfico: Joaquín
Burgariotti.- Asistencia general: Ariel Lutzker.- Asistencia de dirección: Natalí
Faloni, Camila Malenchini.- Colaboración artística: Natalí Faloni, Camila
Malenchini.-
3759 Teléfonos: 4862-1167